martes, 29 de mayo de 2012

Autoeditados

El pasado fin de semana presentamos en Autoeditados, la feria de la autoedición que se celebra cada año en La Alhóndiga Bilbao, nuestro flamante nº00. Compartimos stand con los chicos de Rumble! y departimos con otros participantes. Interesante evento que habrá que seguir de cerca.

martes, 22 de mayo de 2012

sueños

Ilustración David Civico

-Una amiga mía que está haciendo gestalt, las constelaciones y todo eso, por un montón de problemas familiares que ha tenido. Dice que se le ha abierto una especie de canal a través de los sueños, que sueña muchísimo, y que como está yendo al psicólogo, muchas veces no sabe si lo que le ha pasado es real o lo ha soñado.
-Se le mezclan canales diferentes.
-Es serio, no sabe si los recuerdos son vividos o soñados.
-Pues yo recuerdo un juguete que no sé si lo he tenido o no. Es un reloj con muchos botones de esos de los ochenta...
-Un Casio
-Sí, un Casio, había algunos que tenían juegos, los primeros que hubo,  y no sé si llegué a tenerlo.
-Lo deseabas... 
-Igual si lo tuve. Tengo esa duda


sábado, 12 de mayo de 2012

sueños

Ilustración Silvia Ocejo

-No es un sueño exactamente, pero me contó que tenía esas imágenes, como un vértigo tremendo a situar juntas objetos extremadamente grandes con otros muy pequeños...

-Yo soñaba esa especie de formas como de arcilla que se iban transformando continuamente. Son esos momentos antes de dormirte, que estás entre la consciencia y el sueño. Formas, luces, ese tipo de cosas...

-Esto era como un mareo, como un vértigo. Y Alberto, un amigo mío me contaba que iba corriendo y que al caer, justo antes, alguien le agarraba.

-Es el instante antes de perder la conciencia, y pasan cosas; se te mueve el pie, actos reflejos...

-Mira, es curioso pero Ainhoa cuando corría, se quedaba dormida en el sofá y los pies le iban solos. Se lo digo y no me cree. Alguna vez le he despertado y le he dicho, “oye, estás moviendo los pies”...

- Ja, ja


martes, 8 de mayo de 2012

sueños

Ilustración Silvia Ocejo
Estoy reunido con alguien que parece ser mi jefe, porque está gritándome. Algo parece no encajar, hay varios tiempos mezclados:  mesa de los años 20, habitación del siglo XVIII, ropa actual...debo ser un viajero del tiempo. Mi jefe me grita cada vez más alto, yo estoy llegando al límite. Entonces, me subo rápidamente a la mesa y grito: Corteen!. Agito los brazos y digo: A positivar!.

Seguro que así se calla.